Quiso Don Bosco que Nuestro director lo acompañara en el cielo antes del día de su festividad y tras muchos días de enfermedad, en la tarde del día 29 Juan José partía hacia la Casa del Padre.
Con la certeza de que ya goza del descanso eterno no podemos esconder la enorme tristeza y la gran pérdida que supone para todos la marcha del Padre de nuestra Casa.
Recordamos sus primeras palabras hace ya seis años cuando llegó Utrera: “ Quiero ser un Padre para la Casa Madre…”, desde aquí tenemos claro que lo consiguió con creces gracias a su forma de ser tan cercana y con la alegría que derrochaba por allá por donde pasaba. Su recuerdo perdurará entre nosotros para siempre, por muchos años que pasen no se nos olvidarán sus risas, sus bromas, sus palabras al oído, sus homilías, sus cantos, su cercanía……
Estamos seguro que pronto nos volveremos a ver Juanjo!, porque tú ya nos esperas ya en el Paraíso.
DEP
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