El premio «Signo y Portador» que otorga la Asociación Juvenil Aldaba es un reconocimiento a personas o instituciones que han trabajado de forma continuada y de manera activa, dedicando su tiempo y esfuerzo por la juventud más necesitada. Con este premio los jóvenes de Aldaba estamos señalando a nuestros modelos en el seguimiento de Jesús y con el estilo de Don Bosco. Personas que hacen el bien por los demás, especialmente por la juventud.

Este año D. Marcial Portillo es el merecedor de este premio.


Don Marcial, nació en Alcalá de Guadaira, e inició su vinculación con la congregación salesiana a una temprana edad. A los 16 años, empezó su etapa de

novicio en San José del Valle, tras la cual, profesa como Salesiano de Don Bosco. Continúa su formación en las casas de Mérida y Utrera, y realizada su Profesión Perpetúa, cursa los estudios de teología en Salamanca y Granada. Después de un paso de dos años por la casa de Algeciras, en el año 1973, Don Marcial vuelve a Utrera, y desde entonces tenemos la suerte de que forme parte de la Comunidad Salesiana de nuestra Casa. Para muchos jóvenes de Utrera, Don Marcial ha sido su profesor de Inglés, y es recordado con cariño por muchas generaciones de alumnos.

Pero sobre todo para multitud de jóvenes procedentes de distintos puntos de la geografía española y que han vivido en esta casa, Don Marcial ha sido un verdadero Padre y Maestro en todos los sentidos.  Don Marcial lleva unos 50 años trabajando por y para estos jóvenes.

El 31 de enero del 2018, en reconocimiento a su labor, el antiguo internado pasó a llamarse «Residencia Don Marcial Portillo SDB». Y en la actualidad sigue ejerciendo funciones como intendente y en la enfermería y los alumnos residentes lo tienen como a un padre.

Para los jóvenes de la Asociación Juvenil Aldaba en los años 80 y 90, fue el encargado de los grupos del itinerario de educación en la fe, del movimiento Cristo Vive, de las antiguas etapas de adolescentes y jóvenes. En el año 1993, con un grupo de estos jóvenes, inició la andadura de la vida de la Asociación de Salesianos Cooperadores en nuestra Casa, como delegado de grupo, acompañando a estos jóvenes en su discernimiento vocacional. Este sería el primero, de muchos grupos de aspirantes acompañados por Don Marcial hasta la actualidad.

En el año 2002 con la Erección Canónica de nuestro Centro, Don Marcial es nombrado Delegado de Centro, función que continúa realizando de forma admirable.

Desde su serenidad y su discreción ha sabido acompañar y ayudar a muchos jóvenes a lo largo de su dilatada trayectoria como religioso, educador, asistente y hermano en la vocación. Don Marcial tiene el don de pronunciar la palabra justa, en el momento justo. Gracias a su formación y caridad ha contribuido al crecimiento personal, intelectual y espiritual de los jóvenes que han tenido la suerte de pasar por su vida.

Dios se ha hecho presente en la vida de muchos jóvenes en la persona de Don Marcial. Por todo ello, y por muchas otras muchas razones, la Asociación Juvenil Aldaba le entrega este premio.

¡Enhorabuena! y a seguir por muchos años más.

Marcial¡FELICIDADES!